Aldeas Infantiles SOS es una organización no gubernamental y sin ánimo de lucro que atiende a niños que se encuentran en situación de vulnerabilidad, con el propósito de brindarles un hogar, impulsar su desarrollo y autonomía y fortalecer sus redes familiares y sociales. En estos momentos tan difíciles, Bruguer ha querido contribuir en el desarrollo de la iniciativa con una donación de pintura, aportando color a las Aldeas y a la vida de muchos niños.

Bruguer ha realizado una donación de pintura valorada en 14.000 euros a Aldeas Infantiles SOS, una organización cuyo objetivo es apoyar y fortalecer a niños, jóvenes y sus familias en situación de vulnerabilidad y proporcionar un hogar a aquellos niños en situación que han perdido el cuidado de sus padres.

“Nos satisface poder aportar nuestro granito de arena y ayudar a todos aquellos niños y jóvenes que se encuentran en situación de vulnerabilidad y así contribuir, en la medida de lo posible, en la creación de un mundo más justo y un futuro mejor”, señala Sandra Ramos, Directora de RRHH de Akzo Nobel Coatings SL. “No tenemos ninguna duda de que esto es tan solo el punto de partida de un largo camino, en el que las organizaciones debemos asumir nuestro papel y demostrar solidaridad y compromiso con la sociedad a través de pequeñas acciones”, añade.

La donación de pintura se ha repartido entre siete de las Aldeas Infantiles que la organización tiene repartidas por España, dotando de color y mejorando el hogar de más de un centenar de niños. Con este programa la organización tiene como objetivo brindar un entorno familiar protector a los niños que ya no pueden vivir con sus padres, en el que puedan crecer sintiéndose queridos y respetados.

“En todos estos años, nuestro principal objetivo ha sido que cada uno de los niños que atendemos sea el verdadero protagonista de su vida y que, a pesar de las circunstancias adversas que le ha tocado vivir, con su esfuerzo y capacidad de superación, pueda recuperarse y salir adelante”, afirma Pedro Puig, Presidente de Aldeas Infantiles SOS España.

Esta iniciativa se suma al resto de acciones de responsabilidad social que lleva a cabo la compañía, como por ejemplo, su icónico programa de donación de pintura conocido como Let’s Colour, a través del cual transforman la vida de miles de personas y lugares a través del color. El primer pintado solidario en España se realizó en el año 2010, en la localidad sevillana de Écija, que quedó devastada tras las inundaciones. Desde entonces, la iniciativa engloba ya a más de 68 millones de personas de todo el mundo, a través de 2.000 proyectos llenos de color.